En el lenguaje coloquial el dato y la información suelen de forma indiscriminada. Sin embargo, los más conocedores, e incluso aquellos que consulten un diccionario de vez en cuando, se podrán percatar de sus diferencias.
El dato como tal es una característica aislada de un ente o ser y que por si mismo no nos permite cambiar nuestra comprensión de éste. Por ejemplo, podemos decir que una casa tiene sólo una planta, pero no nos acerca a una caracterización global de ésta. Hoy en día, muchos tenemos acceso a un número ingente de datos: de personas, de manzanas, de países, de organizaciones. Incluso, es posible crear bases propias con instrumentos hechos por uno.
Ahora bien, la información es un conjunto de datos analizados y sintetizados por un experto que permiten acceder a nuevos conocimientos sobre algún tópico en particular. Por ejemplo, siguiendo con el ejemplo de la casa si sabemos además que tiene piso de tierra, viven en ella más de veinte personas, no cuenta con acceso a internet, tiene menos de seis focos, no tiene auto ni baño para uso exclusivo de los habitantes de ésta nos permite asumir que se trata de un hogar de nivel socio económico medio-bajo a bajo.
Este ejemplo, aunque burdo, nos permite entender la diferencia que hay entre dato e información. La investigación de mercados permite tener acceso a información que de otra manera quedaría simplemente en inmensas bases de datos que poco nos pueden decir por sí mismas. Si necesitas apoyo para sacar el máximo provecho a tus datos, e incluso a obtenerlos, puedes contactarnos.
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