El día de San Valentín en 2020 todavía se disfrutó sin la crisis sanitaria. Entonces, el rumor de una epidemia en Asia se veía lejos y se cifraron esperanzas de que sería un asunto menor. No obstante, todos somos testigos de que no fue así. Al momento de publicar esta entrada el final de la pandemia se vislumbra lejano. Este próximo domingo volverá a ser el día del amor y la amistad. La pregunta que hoy nos planteamos en medio de este escenario es cómo continuarán los cambios en la relación entre marcas y personas.
Antes hemos descrito tendencias e hipótesis de transformaciones en esta relación. El temor a contagiarse, los limitación de recursos de algunos segmentos y el distanciamiento físico han dirigido la adecuación de los patrones de conducta de los consumidores. En esta ocasión queremos referirnos a este último motivador ya que sus efectos podrán verse por un tiempo más allá del fin de la contingencia.
Y este 14 de febrero será una fecha de especial atención para tratar de entender cómo puede ser el panorama en el futuro cercano. En Navidad y Fin de Año se observó que, a pesar de la gravedad del número de contagios, las personas se movilizaron para reunirse con sus seres queridos. En su momento fue un alivio para algunos sectores de la economía. No obstante, el costo en el corto plazo se tradujo en una ola pronunciada que apenas da tregua.
Si el cierre de 2020 puso a prueba nuestra tolerancia a la frustración respecto a nuestros lazos familiares, el próximo domingo en varios países se verificará el peso de nuestras relaciones amorosas y amistades. No es para menos. En algunos sitios esta fecha es de las más importantes en el calendario. Giros comerciales como el de restaurantes, hoteles, florerías y confiterías dependen en gran medida del éxito de esta celebración.
El distanciamiento físico jugará un papel fundamental para dar respuesta al comportamiento observado entonces. ¿Habrá un repunte de ventas ante el ímpetu de los consumidores para celebrar? ¿Seguirán ganando protagonismo las soluciones vía internet para decir «te amo» al ser amado? Las respuestas a éstas y más preguntas no pueden pasar por alto para los que nos dedicamos a la investigación de mercados porque darán pie al estudio de las tendencias futuras.
Las personas suelen identificar a algunas marcas como una amistad más si tienen un alto grado de satisfacción e identificación con ellas-. Es por ello que las hipótesis y prácticas que describamos este 14 de febrero pueden ser útiles a la hora de diseñar nuevos estudios cualitativos con el objetivo de planear la «nueva convivencia» sin distanciamiento físico.
La vida cotidiana nunca volverá a ser la misma y la generación de padeció por el COVID-19 vivirá el resto de su vida marcada por las lecciones que dejará cuando sea un recuerdo. Entender esta generación será un reto constante para los usuarios de investigación de mercados. En Acertiva estamos atentos a tus mensajes para orientarte en tus próximos proyectos con miras a entender este fascinante fenómeno.
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