De acuerdo con un análisis publicado por el World Economic Forum (WEF) se espera que entre los años 2018 y 2022 se perderán 75 millones de empleos a causa de la automatización y el avance tecnológico. No obstante, se espera que se generen 133 millones de nuevos empleos que requerirán de nuevas habilidades. Los puestos con mayor demanda estarán relacionados con el manejo de datos, software, comercio electrónico y redes sociales. El aumento en la demanda por habilidades relacionadas con software y manejo de datos no es sorprendente. No obstante, si resulta interesante observar que otros puestos que tendrán mayor demanda son el servicio a clientes, ventas y mercadotecnia, capacitación y desarrollo humano, desarrollo organizacional y gestión de la innovación. Lo cual nos deja entrever que además del manejo de la tecnología será necesario contar con habilidades típicamente humanas como lo son la creatividad, originalidad, iniciativa, pensamiento crítico, persuasión, negociación, atención al detalle, adaptabilidad al cambio, flexibilidad y resolución de problemas.
Dentro de este entorno los educadores y el ecosistema de proveedores de educación desempeñarán un rol muy importante en apoyar a todas las personas desplazadas por la automatización para adquirir nuevas habilidades e invertir en el desarrollo y mejora de los sistemas de capacitación y enseñanza.
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