Los consumidores no siempre hacen lo que dicen. La mentira es un mecanismo de defensa que los seres humanos hemos desarrollado como estrategia para evitar el rechazo social. Lamentablemente, este mecanismo de defensa natural puede echar a perder tu estudio de mercado. Para evitar esta situación te hacemos cuatro sugerencias: 1) Observa, no solo preguntes. 2) Adopta una postura neutral en tu vestimenta, lenguaje, preguntas, etc.; 3) Solicita retroalimentación de forma anónima, especialmente cuando se trata de temas sensibles; 4) Siempre pregunta «por qué» para comprender las motivaciones de los consumidores, ¡nunca te quedes con una respuesta superficial!
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