La Paradoja De La Innovación: Renovarse O Morir

El mundo comienza a pasar página de una forma u otra luego de una coyuntura sanitaria histórica. Y con ese regreso a lo más parecido a la anterior normalidad es que algunas actividades tienen que volver a reinventarse. Algunos sectores supieron aprovechar la ola de nuevas costumbres a sabiendas de que se trataba de un fenómeno transitorio. Tal es el caso del segmento de suministros para reducir el riesgo de contagios. La demanda de cubrebocas y gel antibacteriales no es el mismo que hace varios meses. No obstante, esta última no es la única actividad que debe hacer una rápida evaluación del por venir para asegurar su sobrevivencia a largo plazo.

El entretenimiento es un área del mercado que se ha fortalecido desde que con las anteriores revoluciones industriales aumentó el tiempo libre de la población. Ese tiempo fuera de las fábricas y oficinas debía ser satisfecho con diversas opciones. En un principio fueron las funciones circenses, las óperas, las obras teatrales y los conciertos. Con el paso de las décadas engrosaron la oferta las películas en los cines y luego en los hogares. Recientemente se han añadido las series que han conseguido hacerse de un importante nicho entre las audiencias.

Enfocarnos en el mercado de las series y películas no es para menos. En los últimos años hemos visto varias revoluciones que nos han puesto a pensar qué nuevos paradigmas dominarán el mercado de forma, más o menos, regular y permanente en el tiempo. A pesar de las incesantes y continuas transformaciones, algunos modelos de negocio suelen ser estables y rentables por un buen periodo de tiempo.

Antes las cintas se proyectaban en los cines y luego de un tiempo pasaban a la pantalla chica. Luego llegaron los DVD y estos tuvieron que convivir con las salas de cines con una ventana de tiempo un poco menor. Con los mejoras en el acceso a internet de banda ancha, servidores estables, plataformas seguras y la confianza de las productoras de contenido es que vivimos enfrentamientos entre el mundo del cine y el del streaming por determinar cuál de los dos es la meca primordial.

La conocida plataforma de la N roja consiguió innovar un mercado con muchos años de anticipación. Es un conocido caso de estudio en Marketing el error cometido por la marca de renta de VHS y DVD dominante a finales del siglo XX por no aceptar la oferta de la, entonces incipiente, empresa de renta de películas por correo y hoy plataforma de renta de películas por internet. El tiempo pasó y hoy el modelo de negocio de ésta última ya fue replicado por casi todas las cadenas de contenido. El mercado de streaming antes visto como un sólido monopolio hoy se ha diversificado a pesar de los esfuerzos de la primera marca que nos convenció de contratar un plan mensual para poder ver todos los elementos de su catálogo desde la comodidad de la casa creando contenido inédito sin los resultados esperados.

En varios certámenes dedicados a premiar lo mejor del cine y las series se ha puesto sobre la mesa el debate de cuánto tiempo más los productos que no se proyecten primero en cines o cadenas de televisión no podrán competir en igualdad de condiciones con sus equivalentes que aún lo hacen. Aunque la crisis sanitaria alejó a muchas personas de las salas de cine a pesar del aumento del tiempo libre de calidad por el trabajo en casa, la tendencia en algunas regiones del mundo muestran una especie de auge de la concurrencia en salas.

La lección del caso expuesto hoy es que la innovación no es un fin: se trata de un camino. Una vez que se encontró un modelo u oferta que atraiga a los consumidores meta se debe trabajar intensamente por adelantarse tanto como sea posible a sus futuras necesidades. Por muy asegurado que se vea el panorama, siempre habrán competidores buscando mejorar lo que ya existe o en su caso replicarlo. Para fomentar e impulsar la innovación dentro de las marcas la Investigación de Mercados es una inversión fundamental. ¿Deseas empezar a innovar en tu marca? En Acertiva podemos ayudarte.